Activos privados: activos que no cotizan en bolsa
Activos privados (también llamados "private assets" en inglés). Estos son activos que no figuran en el mercado de valores y que, en general, son propiedad directa del propietario / familia o de una empresa. También se denominan inversiones alternativas ilíquidas. Hoy, los más comunes son el private equity, la deuda privada y los bienes inmobiliarios, ya sean comerciales, industriales o residenciales. Sectores a los que generalmente es difícil acceder a través de los canales públicos tradicionales, pero que a menudo ofrecen un crecimiento de capital atractivo.
En general, los inversores en activos privados son inversores institucionales profesionales, como compañías de seguros, fondos de pensiones públicos o privados, fondos de previsión o fondos de capital privados. También hay gestores de patrimonios privados.
Los niveles mínimos de inversión pueden ser elevados. Sin embargo, este tipo de inversión permite obtener un alto rendimiento potencial, al tiempo que diversifica la cartera. Además, el rendimiento se mantiene constante en el tiempo, independientemente de las condiciones del mercado.
Los activos privados permiten aprovechar las oportunidades de mercado que de otro modo serían inaccesibles a través de los canales públicos. Por ejemplo, en empresas innovadoras que no cotizan en bolsa, en las que solo es posible invertir a través de capital riesgo. O incluso proyectos de infraestructura verde o social con un fuerte impacto en el medio ambiente y la economía real.
Algunas de estas inversiones pueden ser muy poco líquidas, por lo que es importante asegurarse de la adecuación del horizonte temporal del inversor, ya que es posible que este último tenga que esperar más tiempo antes de poder vender los activos mantenidos.