Se define como Sistema de crédito social. Es el programa introducido en China desde 2015 para clasificar la reputación de sus ciudadanos mediante la recopilación de datos individuales. Y ahora, casi cinco años después, Pekín está poniendo a punto un sistema parecido para las empresas, que preverá incluso sanciones e incentivos en función de los datos recopilados sobre los comportamientos de las empresas por parte de las agencias gubernamentales.
Pero ¿cómo funciona este sistema? El programa se basa en la tecnología, mediante la recopilación de los datos relativos a los individuos y las empresas. El objetivo final es guiar a la ciudadanía hacia comportamientos virtuosos. Mediante el uso de los big data en manos del Gobierno, a cada individuo se le asigna una puntuación que representa su «crédito social», creando una especie de calificación de la ciudadanía. Los comportamientos virtuosos se premian, mientras que los comportamientos negativos —como el impago de deudas o la dependencia del juego— se sancionan. Entre los castigos previstos están la prohibición de volar, la ralentización de la conexión a Internet o la exclusión de hoteles y de trabajos de gran prestigio.
A día de hoy, el sistema aún no está operativo a nivel nacional. Existen en su mayoría experimentaciones gestionadas a nivel local, con la participación de las agencias gubernamentales y de los gigantes tecnológicos chinos como Alibaba y Tencent, que son las mismas empresas que también están participando en la ampliación de los sistemas de reconocimiento facial, otra fuente de recopilación de los datos destinados al sistema de crédito social.
Huawei, Alibaba Group y Tencent también se encuentran entre los miembros de un consorcio al que se ha encomendado el desarrollo de una de las bases de datos del sistema dedicado a las empresas. Las variables consideradas son cuatro: pago de facturas, capacidad de cumplir con los contratos firmados, preferencias y comportamientos personales y relaciones interpersonales. De esta manera, se clasificarán las empresas como «buenas» o «malas».
Actualmente, en el sitio web gubernamental Credit China hay una lista negra, para los ciudadanos que hayan cometido infracciones, y una lista blanca, para los que hayan tenido comportamientos legales. Otro de sus objetivos consiste es mostrar públicamente quiénes han tenido comportamientos modélicos, para que funcione como elemento disuasorio.
