Seleccione otro perfil de inversor Seleccione su perfil de inversor para acceder a más contenido

ASG en la práctica: Mary-Therese Barton habla sobre compromiso con prestatarios soberanos de los mercados emergentes

Renta fija
Hablar de temas como la educación o la sanidad con los gobiernos forma parte de nuestro deber fiduciario y nos ayuda a obtener una perspectiva integral de los países en los que invertimos, afirma la responsable de deuda emergente, Mary-Therese Barton.
engaging with sovereign borrowers

El compromiso con los emisores soberanos es un tema que ha cobrado mayor importancia para los inversores en mercados emergentes. ¿Podría explicarnos algo más al respecto?

En la comunidad de inversores existe un mayor reconocimiento de que las cuestiones ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ASG) son importantes para el desarrollo a largo plazo de los mercados emergentes. En nuestro equipo, consideramos que forma parte de nuestro deber fiduciario establecer un diálogo sobre estos temas con los emisores soberanos –nos permite tomar decisiones de inversión mejor fundamentadas y nos ayuda a mejorar las rentabilidades a largo plazo. Y si la totalidad del sector continúa dedicando más tiempo y atención a esto, podríamos realmente empezar a marcar una gran diferencia. 

Al mismo tiempo, los emisores soberanos ahora están dedicando recursos y abriendo el diálogo sobre asuntos que atañen a las cuestiones ASG. Nos reunimos periódicamente con los gobiernos y aprovechamos la ocasión para debatir las áreas que nuestro análisis ha puesto de relieve. En Sudáfrica, por ejemplo, hemos hablado de la protección de la enseñanza en el contexto de los recortes del gasto y de la importancia de mejorar los resultados educativos. 

¿Cómo funciona el compromiso con los emisores soberanos?

La interacción con una nación soberana es especialmente complicada, principalmente porque es difícil determinar cómo ejercer presión de manera eficaz. A diferencia de esas clases de activos en las que los accionistas pueden utilizar sus derechos de voto para comprometer y desafiar a los equipos directivos de las empresas, nosotros, como inversores en bonos soberanos, no podemos votar. Además, el compromiso del inversor soberano puede ser malinterpretado como actividad de lobbying, una defensa o un intento de interferir en las decisiones políticas de los gobiernos. 

A pesar de estas dificultades, tratamos de colaborar activamente con los emisores soberanos, normalmente a través de sus responsables de la gestión de la deuda y/o de los tesoros públicos. Creemos firmemente que podemos contribuir a impulsar el cambio para hacer avanzar las agendas de sostenibilidad de los países. Para aumentar y amplificar nuestra influencia, a veces nos asociamos con otros inversores. Por ejemplo, nos hemos unido a la Emerging Market Investor Alliance (EMIA), colaborando con otros inversores institucionales para llevar a cabo iniciativas conjuntas y compartir ideas de compromiso. Lideramos un compromiso con Colombia en el que hemos ofrecido orientación para la emisión de bonos con etiqueta ASG.

EMpower - The Emerging Markets Foundation

¿Cómo tienen en cuenta el elemento social en sus inversiones?

Las cuestiones sociales son sumamente relevantes a la hora de entender los mercados emergentes, más aún en un contexto post-COVID. Los niveles de pobreza han retrocedido décadas debido a la pandemia. Creemos que las cuestiones sociales –como la sanidad, la educación, la independencia judicial o la corrupción– son fundamentales para el desarrollo estructural a largo plazo de los mercados emergentes. Son las áreas que necesitan más financiación. 

No obstante, muchos gobiernos de los países en desarrollo están ahora sometidos a objetivos medioambientales muy estrictos, por lo que probablemente habrá un cambio de prioridades hacia el ámbito ecológico. Ya estamos observando un gran interés en la emisión de bonos verdes. Es donde vemos la mayor demanda de los clientes, y los gobiernos han respondido a ello.

La clave para incluir adecuadamente las cuestiones sociales en nuestro proceso de inversión es la investigación en las áreas de interés. Hemos establecido una alianza con EMpower, una organización que trabaja en el empoderamiento de las mujeres y los jóvenes marginados en riesgo en los mercados emergentes a través de la educación, el empleo y los proyectos sociales. Nuestra relación con EMpower nos permite disponer de estudios que no obtendríamos en otra parte. Nos reunimos con los responsables de sus programas y exploramos sus proyectos para comprender realmente los problemas. Esto nos ayuda a completar nuestra comprensión de la trayectoria futura de estos países. En combinación con nuestra investigación en profundidad y nuestra metodología de puntuación, podemos evaluar los riesgos, pero también construir cada vez más estrategias centradas en los criterios ASG

En los últimos 18 meses, nos hemos reunido con gestores de programas y organizaciones de Brasil, Argentina y Colombia, lo que nos ha permitido conocer a fondo los retos a los que se enfrentan en materia de educación y exclusión social, problemas que lamentablemente se han agravado a raíz de la crisis crediticia.

Aportamos estos conocimientos cuando nos reunimos con los miembros de los ministerios de finanzas o de trabajo. Demostramos que nos tomamos en serio nuestro papel de inversores, centrándonos en los resultados positivos a largo plazo.

¿Dónde ve el crecimiento de la inversión soberana sostenible?

Incluso en el actual contexto de volatilidad del mercado, y con la emisión soberana en mínimos históricos, hemos visto una fuerte actividad en el espacio de los bonos ASG, en particular para los bonos verdes. En mi opinión, esto representa un cambio estructural en la forma en que los gobiernos de los mercados emergentes acuden al mercado.
Los bonos verdes no son perfectos, pero son un primer paso importante para mejorar la transparencia y crear relaciones multilaterales con gestores de activos, bancos y organismos como la ONU o el Banco Mundial para maximizar el impacto. A mi juicio, esa colaboración es la que va a cambiar las reglas del juego. 

Contrariamente a lo que podría pensarse, los mercados emergentes no son seguidores de la tendencia en lo que respecta a los bonos verdes y a otros bonos con etiqueta ASG. Esta financiación es tan importante para ellos que están liderando la innovación. Por ejemplo, los países emergentes emitieron un total de 81.900 millones de USD de bonos con etiqueta ASG en el primer semestre de 2022, lo que supone un aumento del 2% en comparación con el mismo periodo de 2021.1 Chile incluso ha decidido emitir únicamente bonos sociales y verdes, nada de bonos clásicos. 
Me anima ver que los bancos de inversión están creando ahora institutos de financiación del desarrollo dentro de sus mesas de emisión. Cada vez incluyen más medidas de impacto, incluso cuando emiten papel convencional. 

Los bonos soberanos con etiqueta ASG crean una alineación entre los inversores y el desarrollo económico sostenible de las economías emergentes. Es importante destacar que la transparencia y la responsabilidad que exigen los bonos con etiqueta ASG proporcionan un marco sólido para el compromiso, lo que en última instancia permite  a inversores como nosotros mantener un diálogo más activo y estructurado con los soberanos sobre resultados sociales y medioambientales.  Los países suelen ser bastante minuciosos en la forma de explicar los objetivos y eso nos da una mejor visión de las prioridades políticas y de reforma. Todo esto nos da la oportunidad de invertir de forma responsable y con impacto.
Sin embargo, para que la clase de activos se convierta en verdadera corriente, necesitamos una mejor alineación con las agencias de calificación, los consultores de inversión y los proveedores de datos.

 

Consideramos que forma parte de nuestro deber fiduciario participar en las cuestiones ASG con los emisores soberanos

¿Cuál es la repercusión en la rentabilidad?

Nos preguntan eso muy a menudo: ¿invertir en bonos con etiqueta ASG implica asumir una pérdida de rendimiento?

Los bonos con etiqueta ASG suelen emitirse con una prima ligeramente inferior. Esto es algo que sopesamos en nuestro proceso de inversión. Si pensamos que los beneficios estructurales a largo plazo de estos bonos son fuertes, entonces estaremos encantados de aceptar esa prima ligeramente inferior, porque estamos hablando de una reducción insignificante dado el porcentaje de la cartera que estamos considerando. Pero en última instancia, creemos que podemos añadir valor a la cartera a través de nuestra selección de emisiones, y nuestras cifras de rentabilidad hablan por sí mismas. 

También hay que tener en cuenta lo que nos ahorramos gracias a nuestras opiniones ASG. Si tomamos el ejemplo de Rusia, nuestro paso a una posición infraponderada en la deuda soberana antes de la invasión se basó en una lógica ESG; sin esa lógica, probablemente uno habría mantenido más exposición a Rusia. 

Creemos que nuestras opiniones en materia de ASG crean la base para debates muy interesantes con los clientes, que valoran nuestro enfoque a largo plazo.